Diablos... debe ser la cosa más arriesgada y sin sentido que alguien pudo hacer por mi. En realidad no necesitaba nada, bastaba aceptar la carga de mis actos y tratar de arreglar las cosas en cuanto se me permitiera. No puedo dudar. No quiero dudar.
Pensé... no es el mismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario